Ella y yo

 

Ella tiene cierto peso en la espalda, siempre tratando de resolverlo todo, buscando fórmulas mágicas para ayudar a la gente que ama.

Yo en cambio tiendo a mantenerme erguida, insinuando cierta calma; pero con incertidumbres y proyectos inconclusos, que muchas noches me desvelan.

Ella marca un ritmo distinto: pausado, metódico y pulsando más momentos en la galaxia.

Yo me atropello por querer hacer las cosas a mi modo, cargándome de proyectos, queriendo un poco más, indagando, preguntando.

Ella es la hija del medio y yo la mayor.

Ella y yo lloramos a mares por las películas y nada de lo que les pasa a nuestros hermanos nos resulta alta ajeno.

Ella hace hablar hasta las piedras y yo las observo.

Ella me dice que soy el sol que alumbra su ventana cada mañana.

Yo no tengo una frase, pero sospecho que ella es la luna más radiante representada.

Ella nació en abril deslumbrando con sus ojos a más de un desapercibido.

Yo nací en enero, pero antes escuché sus latidos y me mire en sus ojos y los sentí guía, también consejo, muchas veces compañía y consuelo.

Ella se quedó cuidando la casa, los chicos, la familia, los enfermos, los recuerdos.

Yo me fui lejos, para entender un par de cosas, necesite la perspectiva, los errores, los miedos y desaciertos, para sentirme segura y así puede recordar y volver en versos.

Ella toma café en jarrito, en cualquier esquina, tiene siempre la excusa perfecta.

Yo tomo mates amargos con burro o cedrón de la huerta.

Ella es profundamente creyente.

Yo hace años que no entro a una iglesia, tantos prejuicios y estereotipos me agotaron.

Ella canta desde chica y forma parte de un coro.

Yo escribo poemas y voy a talleres de lectura.

Ella al igual que yo, no toleramos el desorden y pasamos buena parte del día acomodando, los rincones.

Ella prepara cosas exquisitas con mucha imaginación y con muy pocos ingredientes, ñoquis el 23, maicenitas para todos los cumpleaños, tartas y empanadas.

Yo aprendí a cocinar que su lado, me traje sus recetas y las fui adaptando.

Ella se define dependiente o atenida.

Afirma que tanto yo como mi hermana, somos emprendedoras, independientes y más decididas.

Ella puede pasar horas en un café jugando al sudoku.

Yo puedo pasar horas frente a una computadora o escribiendo en el patio.

Ella puede zurcir con paciencia santa una media, tejer un chaleco o coser un disfraz.

Yo de tantos cursos, se moldear la arcilla, bruñir una olla o bordar.

Ella sueña con una casa para recibir a los hijos, y nietos.

Yo sueños con viajes y lugares que exóticos, saber de culturas, mirar otros mares.

Ella de chica hacía natación y ahora camina.

Yo amo los deportes y el vértigo, ella no los tolera.

Ella hace promesas en cuarentena. Yo nunca.

Ella no sabe de plantas, yo sí.

A ella le gusta la cerveza y a mí el vino blanco.

Ella se tienta con las comidas, ama las picadas.

Yo seguí por años dietas vegetarianas.

Ella a los 29 tenía marido y cinco hijos pequeños.

Yo a mis 29 tenía un gato pero me abandonó.

ELLA