Efectos de un mate muy caliente y amargo
Es un domingo como cualquier otro pero "és" este instante, momento, segundo o suspiro en el que me lees y puede que ya no vuelva. Estoy sentada en la escalera pensando en el proyecto, las cortinas blancas y la puerta roja "si roja". Y me acuerdo de que hace un tiempo estábamos en una terminal viéndonos por primera vez y esa misma noche despidiéndonos, la caída mientras yo cantaba Cerati y después cuando en abril te mudaste al mono-ambiente y en el otro departamento ya super instalados, pasábamos nuestras primeras fiestas solos. Altero presente, pasado y futuro todo pasa mientras vos estás a media cuadra y Troilo mastica un hueso; yo tomo unos mates muy calientes amargos. Todos pasan también: los autos, las motos, los ruidos o un feliz cumpleaños a lo lejos. Petrona esta serena, los bichos se inmolan frente a un foco (lo más parecido al sol o al calor). El cielo está nublado, corre una leve brisa casi imperceptible. Quizás llueva y oj...